Simpáticas moras en las fiestas de Moros y cristianos de El Campello.
La técnica del "robado fotográfico" capta espontaneidad,
frente al posado artificial ante la cámara que derrocha simpatía pero de un
modo un tanto forzado, ya que mucha gente sustituye su forma de ser por un cliché
que ellos creen les favorece cuando ve a una cámara apuntándoles de ahí que lo
titule “sonrisa Profidén” que es lo que nos regala a los ojos muchos anuncios
de marcas dentífricas, ojo, no critico a esta gente tan simpática y de hecho las
prefiero mil veces antes, que a los
reacios a ser fotografiados, solo argumento que a veces los que fotografiamos
detectamos o sabemos diferenciar esas cosas.
De hecho la diferencia existente entre una buena modelo fotográfica
y una mediocre, no tiene nada que ver con su exuberancia y curvas, si no en su
saber estar ante las cámaras. Así que cuando bajamos a pie de calle, con gente
normal, debemos ser muy conscientes de que aparte de sabe manejar a las mil
maravillas la cámara para conseguir una foto nítida y una buena composición,
existen muchos más factores que hacen de una foto, la foto que nos gusta.
Por ello, no suelo ir avisando a la gente de que las voy a fotografiar, prefiero que pasen de mi y vayan a su bola, que se acostumbren
a verme y se cansen de mi, entonces los fotografiare y al final, son esas las
que más me gustan, mientras que las otras, en que posan, simplemente están bien
o son graciosas en el mejor de los casos.
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