El nuevo Arco instalado en la playa de San Juan en la parada del Tram, es sin duda una tentación para los alpinistas urbanos (por su forma) y para los graffiteros (por su color), habiéndose tomado la solución de colocar una serie de pinchos en sus extremos para disuadir a los escaladores, pero que a todas luces resultan escasos en numero y por lo tanto, fácilmente esquivables, esperemos que no tengamos que leer la noticia de algún chaval lleno de hormonas (casi seguro que será del genero masculino, más que del femenino a quien se le ocurra esas ideas, a pesar de la igualdad) haya sufrido una caída desde el Arco.
No hay comentarios:
Publicar un comentario