Vamos a rememorar en estas líneas y con las fotos que se adjuntan, las transformaciones que se han llevado acabo en este enclave alicantino hasta llegar a la fuente-monumento que ocupa en la actualidad la rotonda por todos conocidos como “La Isleta”.
Aspecto actual de “La Isleta”.
En su día y desde que yo recuerde existió en la rotonda, no una cafetería como algunos dicen, si no un cabaret, bar de alterne o puticlub, me da igual como lo llamen pues fue esa su función, la mayor parte del tiempo que se mantuvo abierto, muestra de ello eran los coches (cochazos para aquel entonces) que aparcaban en la misma rotonda y que mas de una vez he estado apunto de comérmelos de sopetón, con el tiempo, aquello cerro y fue abandonado a su suerte durante años, siendo arrasado su interior y convirtiéndose en un estercolero, además de punto de reunión para ciertos individuos.
Vista aérea del Google Earth en su versión cinco, donde aun se observa la cafeteria.
Pasan los años y la entonces edil de Urbanismo, Sonia Castedo, decide cambiar el aspecto de la rotonda con el apoyo de los vecinos de zona, que viven y pasan por allí todos los días. De quien fue la idea de derribar la “cafetería”, del edil o de los vecinos, que mas da. Sin embargo estas intenciones derivaron en polémica, a raíz de la petición del Colegio de Arquitectos de Alicante sugiriendo la restauración del inmueble, cosa que se desestimo como queda patente.
Foto realizada el Lunes de Pascua, del 9 de Abril de 2007, donde se aprecia la cafetería.
Yo no niego que el arquitecto que la diseño fuera de lo mejorcito, pero también es verdad que esta no fue su mejor obra; eso sin añadir, lo absurdo que era la existencia de un edificio, mas o menos moderno, en medio de una rotonda, que hace de pensar en las influencias tendrían los dueños de ese local, en aquel entonces, para haber conseguido que no se les expropiara ese terreno.
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