Calle de la Cruz de Mayo ganadora, adornada con motivos fulbolisticos.
ORIGENES DE LA FIESTA DE LAS CRUCES DE MAYO.
Como suele suceder en todas las fiestas en las que existe un protagonismo es religioso, este siempre va acompañado de un entorno laico o pagano.
En el aspecto religioso la iglesia católica conmemora el 3 de Mayo la exaltación de la Santísima Cruz, descubierta por Santa Elena, debido a la conversión de su hijo a la fe cristiana, tras este tener una visión de una cruz antes de una batalla, por lo que la hizo construir y puso al frente de su ejercito, el cual derroto con facilidad a un ejercito más numeroso, este, el emperador Constantino I el Grande cuando averiguo el significado del símbolo de la Cruz se hizo bautizar, encomendado a su madre Elena la búsqueda de la Cruz donde murió Jesús.
Dice la leyenda que Santa Elena cuando la encontró, la adorno con sus joyas y flores.
En cuanto a sus orígenes paganos son fruto del culto a la naturaleza que rebrota y renace en primavera, época de esplendor floral.
Aunque no existe documentación con anterioridad al siglo XVIII que testifique sobre su celebración, sin duda sus origenes son más antiguos, aunque su máximo esplendor como fiesta popular se da durante los siglos XVIII y XIX, iniciando su decadencia a partir del siglo XX.
En su momento las Cruces de Mayo fue una fiesta muy extendida por mucho pueblos de la geografía española, cada uno con distintas peculiaridades que los diferenciaba unos de otros, pero manteniendo como constante que la fiesta gire entorno al símbolo de la cruz, la cual es engalanada y floreada de distintos modos.
Entorno a estas cruces se vive una fiesta con bailes y juegos, e incluso con procesiones, tanto de carácter pagano como religioso.
Se puede decir que las Cruces de Mayo son las fiestas del Pueblo, donde los vecinos son los verdaderos protagonistas y participes.
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