Un año más, la Hoguera Seneca Autobuses, se alza con el primer premio en categoria especial con un monumento que aúna una buena terminación y ejecución, junto con unos ninots que llevan en su ADN el estilo de los autores, así como una crítica muy cuidada. Eso hace que la gente comente su belleza, los personajes conocidos que incorpora y las mordaces críticas que lanza, haciendo que el boca a boca atraiga mucha gente y es que al final, una hoguera, es algo más que una obra de arte, tiene que tener algo que destaque como mínimo para no ser olvidada, ya que con el simple "...NO ESTA MAL." , nuestro cerebro la manda al rincón del olvido junto con los datos innecesarios, uno se acuerda de las hogueras no por su autor la mayoría de la veces, si no por su remate, por tal ninot o porque ponía verde a no se cuantos... si no tiene alguno de esos ingredientes que refuerzan su recuerdo, mal lo ha hecho el artista constructor. |
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