Hoy iniciamos una serie de tomas realizadas en el 2017 entorno al desfile que se realiza todos los años dentro de los actos del certamen "Benidorm Pride". Empiezo con una foto en la que destacan los ojos por encima de todo. En un desfile como este, uno encuentra colorido y un exotismo diferente al de su vida diaria, lo cual lo hace visualmente atractivo para un fotógrafo, sin que ese ambiente de fiesta impida captar fotos interesantes y buenas, como la que encabeza esta entrada. Y aunque acudo a otros tipos de eventos festivos, en estos, aparentemente minoritarios (pocos son los fotógrafos que suben fotos de ellos o van a captarlos, tal vez cuando vayan muchos perderá su encanto como ocurre en todas las fiestas multitudinarias) me lo paso bien, la sonrisa nace pronto, con sus chascarrillos y sus atrevidos, a veces y otras, divertidos disfraces, no se están quietos, interactúan entre ellos y con el publico, los esquemas fijos lo determinan objetos o carrozas, l@s participantes bajan, suben, salen del desfile, otr@s se incorporan o simplemente van hacia delante o atrás en busca de alguien, siempre esta cambiante y eso lo hace muy vivo y a la vez caótico, algo que a muchos le gustara y otros odiaran. Mas que un desfile me recuerda a las manifestaciones, donde las zonas fijas son las pancartas gigantes con sus allegados y muchos que se desplazan en cualquier sentido de la manifestación, uno es libre de irse cuando quiera y de incorporarse en cualquier momento. En fin, concentrémonos, la foto primera es el resultado final como veréis a continuación de algo que me gusta mucho, disparar sin avisar, vi a estos dos chicos enfrascados liándose la bandera del orgullo y comencé a fotografiarlos. |
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