Ya hace unas semanas termine la lectura del primer libro de Roque Pérez, “Veinte Maneras de Bajar al Sótano” y he de ser sincero, al decir que me gusto mucho, por varios motivos: El primero de ellos es que siento predilección por la literatura terrorífica, fantástica y de ciencia ficción, si a esto le unes el que sea un genero que llevaba un tiempo olvidado, podéis comprender que lo cogiera con ganas, por suerte es una novela de relatos cortos, lo cual me ha venido de perlas, ya que me pillo en un momento en que prácticamente no tenia tiempo material para la lectura, de ahí que un relato corto me llenara y colmara plenamente.
Como buen narrador de historias de miedo, Roque, nos embarca en una lectura salpicada de situaciones inquietantes, crueles y terroríficas… que a su vez provocan en nuestro ser angustia, tensión y seamos sinceros, a pesar de nuestra edad, una desazón extraña que algunos valientes dirían que es miedo, pero del bueno.
Particularmente, si tuviera que calificarla, pondría a la mayoría de los relatos un notable elevado y unos cuantos se llevarían matricula de honor, por originalidad e innovación, sin duda no te defraudara, de ahí que te recomiende su lectura sosegada, en la quietud y el silencio de la noche, pues la buena lectura te envuelve y lleva a otros mundos, siempre y cuando puedas desconectar algo, del entorno mundano que nos rodea.
Como buen narrador de historias de miedo, Roque, nos embarca en una lectura salpicada de situaciones inquietantes, crueles y terroríficas… que a su vez provocan en nuestro ser angustia, tensión y seamos sinceros, a pesar de nuestra edad, una desazón extraña que algunos valientes dirían que es miedo, pero del bueno.
Particularmente, si tuviera que calificarla, pondría a la mayoría de los relatos un notable elevado y unos cuantos se llevarían matricula de honor, por originalidad e innovación, sin duda no te defraudara, de ahí que te recomiende su lectura sosegada, en la quietud y el silencio de la noche, pues la buena lectura te envuelve y lleva a otros mundos, siempre y cuando puedas desconectar algo, del entorno mundano que nos rodea.
Gracias por tus palabras. Me alegro de que te haya gustado la experiencia de bajar al sótano.
ResponderEliminarUn saludo
Roque Pérez Prados